Educación Financiera

La libertad financiera solo se puede conseguir con Educación Financiera.

EDUCACIÓN FINANCIERA PARA NO EXPERTOS

¿Vale la pena aprender educación financiera? ¿Puede acceder a este conocimiento cualquiera? ¿Por qué no se enseña en las escuelas?

Estas son algunas de las interrogantes en las que me gustaría profundizar hoy a lo largo de este artículo y quiero que me ayudes con tus opiniones a brindarle luz a todos aquellos que quieran empezar en este mundo.

https://www.youtube.com/watch?v=nZoAGXi7vpk

LA EDUCACIÓN FINANCIERA

Mucho se habla de la educación financiera, pero poco se dice sobre que involucra realmente tener educación financiera.

¿es dejar de ser empleado? ¿es emprender? ¿es acaso ser un profesional independiente? ¿si gano millones, ya tengo educación financiera?

A cualquiera que le preguntes sobre este tema te va a dar su propia definición de lo que es la educación financiera.

Es más, te invito a que pongas que es para vos la educación financiera en la caja de comentarios y a su vez que me digas en qué áreas debería centrarse.

En base a esto me gustaría contarte una historia, que si bien es para niños puede que te dé algunos indicios sobre para dónde debería apuntar la educación financiera.

La historia se llama, que no se quede nadie sin comer.

Si te interesa aprender más sobre estos temas, te dejo el curso de MICRO FINANZAS PERSONALES que podés ver ¡ACÁ!

“¡Mañana es viernes, mañana es viernes!”,

Se repetía emocionado Julián una y otra vez.

Por fin consiguió dormirse soñando la recompensa que recibiría de sus padres al otro día.

A la mañana siguiente, su padre lo despertó con una gran sonrisa y le entregó un sobre amarillo mientras decía: “Julián, aunque sólo tienes 12 años nos has demostrado a mamá y a mí que eres muy trabajador y responsable. Has cumplido con tu palabra y el jardín está impecable: el césped  cortado, las plantas regadas, el tractor aceitado y ¡hasta has arreglado el arcón de las herramientas!

Estamos muy orgullosos de ti y por eso, como acordamos con mamá, queremos reconocer tu trabajo pagándote tu primer sueldo. Estamos seguros de que serás capaz de cuidarlo y sacar provecho de él”.

Le dio un abrazo muy fuerte y lo dejó solo para que pudiera abrir el sobre con tranquilidad.

Julián, entusiasmado, abrió el sobre y se sorprendió al descubrir que estaba lleno de dinero. ¡Mucho dinero! 

Empezó a contar los billetes:

1, 2, 3, 4, 5… ¡¡MIL PESOS!! ¡Había ganado 1.000 pesos en tan sólo tres días de trabajo! ¡Qué orgulloso estaba de sí mismo! ¡Ahora sí podría comprarse todo lo que quisiera! ¡Videojuegos, golosinas, revistas y muchas cosas más!

Mientras soñaba despierto con todas las cosas que se iba a comprar con su dinero, de repente descubrió en el fondo del sobre una pequeña nota que parecía escondida entre los billetes. La leyó con mucha atención:

Querido hijo:

¡Felicitaciones por tu primer sueldo! Has hecho un gran trabajo y te mereces cada peso.

Sin embargo, antes de que decidas cómo vas a gastarlo, me gustaría contarte una historia que mi padre me enseñó hace mucho tiempo, y que me ha sido de gran ayuda a lo largo de mi vida:

Quiero que imagines que todo ese dinero que ahora tienes entre tus manos es un pastel de chocolate. Un pastel con el que tendrás que convidar a cuatro invitados: el señor Juan Ahorro, el señor Tomás Gastos, la señora Ana Compartir y la señora Julieta Inversión.

Como esos invitados son tus fieles amigos y te acompañarán toda la vida, tienes que cortar el pastel de la mejor manera, para que nadie se enoje porque comió de más o de menos. A veces, alguien tendrá más hambre y podrá comer un poco de más, como cuando tenemos que comprar muchas cosas y tenemos que dedicar más dinero para el señor Gastos. Pero si todos los meses hacemos lo mismo, los demás invitados van a terminar enojándose contigo, porque les toca poco pastel y comerán de menos.

Recuerda que debes ser un buen anfitrión y no quieres enfadar a nadie, por lo que tendrás que dividir el pastel de la manera más justa y equitativa posible.

A veces, según las circunstancias, podrá ser necesario que un mes le des una porción más grande a alguno de los invitados, pero lo más importante es que, cada vez que tengas que repartir la torta del dinero, ¡ningún invitado se quede sin comer!

Para despedirnos, te dejamos esta hoja que se llama presupuesto, para que puedas escribir en ella cómo vas a repartir tu dinero para alimentar a los invitados, y recuerda: ¡Que nadie se quede sin comer!

Con mucho amor, papá y mamá.

Después de leer esta carta, Julián se dio cuenta de que él había estado pensando sólo en alimentar al señor Gastos. ¿Y qué pasaría con el señor Ahorro o las señoras Compartir e Inversión? ¡Él no podía dejar a nadie sin comer!

Después de reflexionar un poco, comenzó a completar con gran entusiasmo la hoja del presupuesto, que tenía cuatro columnas con los apellidos de sus invitados: AHORRO, GASTOS, COMPARTIR e INVERSIÓN:

1 – Porción para el señor Juan AHORRO: El primer paso fue identificar sus objetivos y necesidades en el futuro, y repartir entre ellos las cantidades destinadas al AHORRO.

2 – Porción para el señor Tomás GASTOS: Después de guardar lo que correspondía al ahorro, pensó en las cosas que quería o necesitaba comprarse, y comenzó a anotar todo el dinero que pensaba gastar inmediatamente.

3 – Porción para la señora Ana COMPARTIR: Una vez separado lo que correspondía al señor Ahorro y al señor Gastos, se puso a pensar que la protectora de animales de la otra calle estaba necesitando unos almohadones nuevos para los cachorros, así que apuntó una parte de su dinero en la columna de la señora COMPARTIR.

4 – Porción para la señora INVERSIÓN: Por último, pero no menos importante, pensó que guardaría el dinero restante para comprarse más adelante una cortadora de césped más grande, que le permitiera cuidar también el jardín de los vecinos ¡para ganar así más dinero!

¡Por fin había terminado su presupuesto!

Julián se sintió orgulloso de haber alimentado a todos sus invitados. También estaba seguro de que, con la lección que aprendió ese día, siempre sería un buen anfitrión para su dinero ¡nadie se quedaría sin comer!

De este cuento me surge preguntarte ¿a quién estás dejando sin comer en tu vida?

Y si le has dado de comer a todos ¿a quién le diste menos este mes?

Dejame tu respuesta en la caja de comentarios. Esto es muy importante para tu desarrollo personal en el ámbito de la educación financiera.

CLAVES DE LA EDUCACIÓN FINANCIERA

Actualmente pienso que hay 5 áreas clave dentro de la educación financiera, que unos debe desarrollar para potenciar su vida.

Muchos dirán: ¿quién no sabe que hay que ahorrar? Eso es básico. Pero au así no lo hacen.

Saben que tiene que gastar menos por su propio bien, pero aun así, no lo hacen.

Saben, sin lugar a dudas, que hay que invertir. Pero adivina, ellos no lo hacen.

Incluso saben que tienen que ayudar, pero hoy no les sobra nada casualmente.

Esto nos da entender algo interesante. Saber y hacer son cosas diferentes.

Ya con solo esto nos damos cuenta también que la educación financiera no es solo pensar en dinero sino como administrarlo y dividirlo adecuadamente. Pero ¿Es suficiente?

¿Acaso  uno no se saca el hambre mirando el menú de un restaurante? No, tiene que pedir la comida.

Puede que luego la comida no te guste o te caiga mal. En cuyo caso, habrá que aprender a elegir mejor o cambiar de restaurante.

Tal vez nuestro estómago no soporta los condimentos de esos tacos mexicanos de los que tanto hablan, o que incluso que esa aparentemente bien decorada comida gourmet realmente no sepa tan bien.

A su vez puede que hoy la comida que siempre comías, esas empanadas ya no tengan el mismo sabor y hasta te cayeron mal. ¿Cómo puede ser si son las mismas empandas de siempre? ¿en el mismo restaurante y me las sirve el mismo mozo? ¿Acaso algo cambio o yo cambié?

A veces pequeños cambios pueden hacer grandes diferencias como por ejemplo, tal vez comas siempre milanesas simples pero un día de casualidad comes milanesas napolitanas.

Sabías que existían pero nunca te habías animado a comerlas porque el tuco y la milanesa no se mezclan, decían en tu familia, o porque se ve mal para los de afuera que comas napolitanas y no milanesas tradicionales.

Probaste y no solo te gusto, ya no queres volver atrás.

Lo mismo sucede con la educación financiera. Si no avanzas, no tiene sentido. La acción en tus decisiones es clave.

El probar, el animar, el dar ese paso es lo que hace la diferencia.

Puede que hoy tu contexto familiar, social o incluso laboral te diga, “eso no es para vos” pero la realidad es ¿quién sabe qué es y que no es mejor para vos?

La mayoría de las veces el que critica está en peores condiciones que el criticado.

Esto me hace acordar a una historia de un ex empleado que entró a trabajar en una fábrica.

Un tipo muy responsable y obediente que recién se insertaba en el ámbito laboral.

No tenía muchos estudios pero era bastante dedicado en todo lo que hacía.

Al entrar en su primer trabajo su gerente, el empleado de más alto rango en la empresa, le explico lo que tenía que hacer en la empresa y a su vez conversando le dijo:

“veo que sos una persona responsable, lo mejor es que uses tu sueldo para invertir en tu futuro y si te esforzas mucho podes lograr todo lo que quieras”

“No se mucho del tema, dijo el empleado, por eso le pregunto: ¿qué haría usted con sus primeros sueldos?”

“Yo, dijo el empleado gerente, invertiría en bolsa y buscaría la manera de abrir una empresa pequeña”

“Ah! Excelente!” Lo voy a hacer.

El gerente medio como que se le rió pero el empleado nuevo sin perder tiempo empezó a trabajar.

Al cabo de 1 año, renunció.

¿Por qué renuncias? Pregunto el gerente. Sos bueno y recién empezas casí.

Nada, hice lo que usted me dijo. Empezé a invertir y me puse un negocio pequeño.

Lamentablemente mi capacidad no es como la suya. Yo no puedo ser empleado y dedicarme a los negocios al mismo tiempo, no me da la cabeza.

Pero yo no tengo empresas, dijo el gerente.

Está bien dijo el nuevo empleado, pensé que tenía como me había aconsejado tan bien.

Seguro usted tuvo que decidir al igual que yo en este momento y optó por ser empleado.

No es nada malo, son decisiones. Lo importante es estar bien con uno mismo.

Esta historia que parece ficción, se repite día tras día en todas las empresas. Incluso empresas como Apple tienen como slogan “día uno” en referencia a esta charla motivacional que siempre se da y el entusiasmo con el que trabajan los empleados.

Pero bueno hay mucha gente que sabe lo que tiene que hacer pero no lo hace.

Esto es otro punto a tener en cuenta en la educación financiera.

No solo se trata de administrar bien sino de ejecutar.

Dar ese paso es clave porque pone en marcha los mecanismos de la educación financiera.

A veces no se trata solo de saber más y más, sino de a medida que se aprende, ir aplicando.

En este canal vas a encontrar muchos videos sobre en qué invertir por ejemplo pero por más que los mires, mucho no va a pasar si no los llevas a la práctica.

Entonces podemos decir que la educación financiera cubre diferentes áreas de la vida y solo tiene sentido si la llevamos a la práctica.

Por esto es que muchas veces se dice que el no tener dinero hoy no es síntoma de falta de educación financiera, sino de una transición.

Es decir, no se evalua la educación financiera solo con el parámetro del dinero sino por un conjunto de áreas.

Muchos millonarios han quebrado muchas veces y se vuelven a levantar al poco tiempo. Esto es gracias a su educación financiera ya que entienden que estar quebrado es simplemente no tener dinero físico hoy, pero tienen de donde sacar más, de su cabeza.

Algunos dicen que el cerebro es la mejor fuente de ingresos pasivos del mundo si se entrena adecuadamente.

Pero ¿debo priorizar la educación financiera antes que todo lo demás?

La respuesta es NO.

La educación financiera debe estar dentro de las prioridades de tu vida pero no ser la única prioridad.

Por ejemplo, si amas pintar o hacer música, esa debe ser tu prioridad máxima la mayor parte del tiempo y la educación financiera un complemento prioritario para poder desarrollar con comodidad tu pasión.

En otras palabras, imagínate a la educación financiera como una batería o pila de una cámara fotográfica.

Podes tener la mejor cámara, pero sin batería no va a funcionar.

Si las baterías están cargadas, la cámara va a funcionar a su 100% y va a poder sacar las mejores fotos, pero a medida que la batería se vaya gastando empeorará su desenvolvimiento. Y si se agota, ya no vas a poder seguir usando la cámara hasta que no recargues la batería.

Creo que está analogía deja bien claro cuál es el papel de la educación financiera y que rol debe jugar en la vida.

Puede que muchos piensen que la educación financiera debe si o si ser la prioridad de tu vida, pero al menos yo no lo veo así. Por más grande que sea la batería o la pila, sin la cámara no tiene mucho que hacer y si la batería no se usa, se estropea.

Y ahí entramos en un problema gravísimo porque una batería corroída puede dañar cualquier aparato que toque.

Muchas veces surge la duda sobre si cualquier persona puede estudiar educación financiera. Y la repuesta es si. Incluso los más pequeños.

De hecho, hay cientos de libros y cuentos sobre educación financiera para niños los cuales te recomiendo ampliamente si tenes hijos.

Y no solo libros, también hay canciones y videos.

En vez de poner a tu hijo a escuchar temas infantiles o dejarlo que que ande al azar por youtube con tal de que no llore. Intentá ponerle una lista de reproducción de videos infantiles sobre educación financiera.

Tienen canciones y animalitos por lo que tu hijo va a estar entretenido pero aprendiendo algo de valor para toda su vida.

Si no me crees, hace la prueba.

Una madre que recién empezaba en el tema de la educación financiera, se emocionó tanto que le empezó a poner videos a su hijo de 6 años.

Al cabo de unas semanas, la mamá encontró entre los dibujos del nene un eje cartesiano y una flecha hacia arriba. Lógicamente el niño no sabía que eran ejes cartesianos, para el solo eran dos líneas.

Cuando la mama le pregunto al nene que era eso él le dijo: acá estoy yo ahora (por el cero del eje) y acá es donde voy a estar si guardo plata (el extremo de la flecha).

La madre al principio se rió pero luego se largó a llorar porque el nene entendía mejor lo que ella le había tomado años darse cuenta.

Hay que tener presente que en los colegios no se enseña educación financiera e incluso en las carreas específicas del tema se enseña pero para ser empleado y no para ser independiente.

¿Por qué pensas que no se enseña educación financiera en los colegios? Dejame tu opinión en la caja de comentarios.

La mayoría creo que es porque no quieren que sepamos del tema. Puede que sea verdad pero creo también que es un tema estructural.

Es muy difícil cambiar la maquinaria educativa porque las personas que la componen no tienen ni idea del tema.

Aunque en la actualidad algunas medias se están tomando en las universidades es poco lo que se hace porque cuesta cambiar.

Lo mejor es tomar las riendas de nuestra educación financiera y no perder más tiempo.

Un pequeño cambio hoy en tu vida, puede tener consecuencias exponenciales en un futuro.

¿te animas a cambiar?

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